En primer lugar, es importante tener en cuenta que la SGAE (Sociedad General de Autores y Editores) es una entidad privada autorizada por el gobierno para gestionar los derechos de autores y editores. No se trata de una entidad pública y los inspectores que visitan los establecimientos para solicitar pagos y levantar actas no tienen autoridad para imponer sanciones. Su función es informar a la SGAE sobre posibles infracciones y es la SGAE la que debe recurrir a los tribunales para reclamar cualquier deuda.

Es necesario tener en cuenta que no solo existe la SGAE, sino también otras entidades como AGEDI y AIE. Pagar a la SGAE no implica que se hayan cubierto todas las tarifas.

En teoría, todos los negocios están obligados a pagar a la SGAE. Los tribunales se basan en el criterio del lucro derivado de la difusión de música e imágenes. En el caso de las grabaciones sonoras, una empresa está obligada a pagar si su uso genera lucro. Sin embargo, los pequeños negocios como dentistas o peluquerías no tienen la obligación de pagar, ya que su servicio no está relacionado con la música y su reproducción no influye en el aumento de su clientela.

En resumen, si un negocio cuenta con un reproductor de música o un televisor, se presume que el propietario está reproduciendo contenido protegido y, por lo tanto, debe pagar las tarifas correspondientes. Es imposible saber qué artistas, productores o autores están incluidos en su repertorio y generalmente es responsabilidad del propietario del negocio demostrar que no está utilizando contenido protegido.

¡Sí, existen opciones alternativas para disfrutar de la música!

Además de la SGAE, hay plataformas en línea que ofrecen contenido musical de autores que no están asociados a sus registros. Estas plataformas se conocen como "música libre" y ofrecen una experiencia única para disfrutar de la música.

Una de estas plataformas es ImaginaSounds.com, que permite a los artistas difundir sus obras y mantener sus derechos comerciales mientras los fanáticos disfrutan de su música. Con una licencia de ImaginaSounds.com, la música se comparte de forma no comercial y a precios más accesibles, lo que significa que puedes disfrutar de una amplia variedad de música fuera del ámbito de la SGAE.